Entonces quiso, a partir de ese instante, volver sobre sus pasos, desdecirse de lo dicho, retroceder sus pensamientos...
Fue cuando la vuelta se hizo ida, la frase una habladuría, el pensamiento varias incoherencias y los pasos fueron saltos mortales...
Pero su memoria acostumbraba empalmar los recuerdos, cada pensamiento, cada frase, cada paso estaba revuelto...
Quiso, a partir de ese instante, volver sobre sus pasos, desdecirse de lo dicho, retroceder sus pensamientos...
Publicado el 25.10.09
Primera reglar de la escrita: No dejarás de robar. Segunda regla: Sí repetirás.
ResponderEliminarLo más hermoso es que de las dos anteriores salga algo sin regla alguna: una creación. Es como magia. La magia de la creación literaria.
Un saludo afectuoso.
Otramaría